Máximo Corvalán realiza escenificaciones, montajes e instalaciones, relacionadas con la vida cotidiana, incluyendo al mismo espectador como parte de ellas por medio de medios de registro audiovisual, logrando establecer diálogos entre la realidad y la virtualidad de las imágenes.
Las obras de Máximo Corvalán dan cuenta de una fuerte reflexión sobre las contradicciones de la sociedad moderna de consumo y de los avances tecnológicos. Además, busca representar en forma irónica, y a la vez dramática, la subsistencia de problemas sociales y polìticos no solucionados que se cruzan con antecedentes autobiograficos del propio autor.