(ES) Tomás de Gavardo busca reunir fondos para competir en Dakar 2023

(ES) Tomás de Gavardo, corredor de Motociclismo, habla sobre su próximo gran desafío el Rally Dakar 2023, los fondos que debe reunir para cumplir con esta hazaña, su relación con su padre Carlo -histórico tercer puesto en el Dakar- y cómo llegó a estudiar periodismo, que actualmente cursa en la UNAB.

(ES) De mirada tranquila y muy silencioso, así se presenta Tomás, piloto de Rally Cross Country, quien como buen corredor observa todo su entorno. Si bien su apellido lo precede, ya que desde muy joven comenzó en el motociclismo, pasión que nació al acompañar a su padre, el recordado deportista Carlo de Gavardo a las corridas y torneos de Rally por el mundo entre ellos, el Dakar, hoy a sus 23 años, se abre camino solo y con esfuerzo.

La afición de su padre se traspasó y Tomás la siguió hasta concretarla en su deporte de vida, que complementa con sus estudios de periodismo, carrera que estudia en la U. Andrés Bello y que eligió por su vocación.

Hoy, su desafío inmediato es correr en el próximo Rally Dakar de Arabia Saudita, competencia que se realizará entre el 31 de diciembre y 15 de enero de 2023. El que se inicia en la ciudad de Dammam, incluye las playas del mar Rojo hasta la orilla del golfo Pérsico. Una competencia bastante significativa para Tomás, pues el mismo recorrido lo realizó su padre, en 2001, logrando adjudicarse el tercer lugar.

Sin duda una aventura que requiere preparación física de alto rendimiento, mucha concentración y, sobre todo, recursos para lograr tal hazaña, los que espera generar durante los próximos dos meses.

A futuro, los desafíos de Tomás de Gavardo tienen una visión clara, principalmente en lo profesional, si bien el Rally le apasiona, su objetivo siguiente es titularse de periodista para luego especializarse en la realización de documentales naturalistas y recopilar imágenes e historias de los parajes más hermosos y recónditos del mundo.

¿Cómo estás?

Muy bien, trabajando duro para ir al próximo Rally Dakar, además de ambientarme aquí en la U. Andrés Bello en tercer año de periodismo, así que, con hartas cosas. Además, estoy organizando una cicletada masiva, “La Cavada”, su octava edición, precisamente para reunir fondos para viajar a Arabia Saudita, donde se realiza el próximo Dakar.

Cuéntanos más detalles de tus posibilidades de ir al Dakar y de esta cicletada.

¡Qué puedo decir, estoy feliz! Es mi primer Rally Dakar a los 23 -uno de los corredores de Rally más jóvenes en representar a Chile- y he trabajado duro para llegar ahí, soy piloto profesional y me he esforzado muchísimo para clasificar, así que estoy muy contento. Ahora viene la parte más dura, que es lograr financiar toda la maquinaria que involucra ir a Arabia Saudita, para ello estoy organizando una serie de acciones para recaudar fondos. Una de ellas es la próxima cicletada que realizaré el próximo domingo 9 de octubre, “La Cavada”, la cual organizamos con mi hermano Matteo, que está enfocada en ciclismo mountain bike, fue creada por mi papá en 2013 y es una carrera que contempla 3 distancias en las que pueden participar los ciclistas, desde lo competitivo a lo familiar.

¿Dónde se realiza?

El evento se realiza una vez al año en Huelquén, en Paine, partiendo en el pueblo y recorre el fundo de nuestra familia. Es un evento deportivo para recaudar fondos para el Dakar, así que tengo todas mis energías en que saldrá muy bien.

Sobre ese tema, este es un deporte costoso ¿Cómo lo financias en general? ¿Estás en alguna asociación?

La verdad y como sabes la cultura deportiva en Chile no existe, por lo tanto, cuesta mucho realizar deportes que son poco convencionales como el Motociclismo. Hoy corro por mi federación –Federación Motociclismo de Chile– los represento, pero no obtengo recursos por ello, en realidad, yo tengo que aportar monetariamente para representar a Chile. Ahora, este período ha sido complicado, los últimos tres años me apoyó el Estado en todo lo que hice, la anterior ministra del Deporte (Cecilia Pérez), me apoyó muchísimo, pero ahora las cosas han sido complejas y me ha costado recibir apoyo, tampoco puedo esperar que quieran apoyarme, porque este año yo sí o sí voy a llegar al Dakar.

¿Cuánto dinero necesitas reunir para viajar a Arabia Saudita?

Por un tema de costos, me resulta mejor adquirir una moto directamente en Europa, la cual pretendo probar en el próximo Andalucía Rally, en España. Por lo mismo lógicamente que hay que financiar lo antes posible la adquisición de la moto y todo lo que implica y, para eso requiero una cifra cercana a los 90 millones de pesos.

Además, del alto costo económico que involucra este tipo de deportes, ¿Qué más se necesita para realizar Motociclismo profesional?

Este es un deporte muy solitario, requieres disciplina, tener incluso hasta la mente muy fría o mejor dicho un buen manejo emocional. Debes tener la habilidad para saber tomar decisiones y resolver un problema a tiempo. Porque si estás en un desierto y se te daña la moto, no te puedes echar a morir ahí ¿no puedes cierto?

Y ¿cómo te preparas para ello?

Realizo mucha meditación, mucho ejercicio de respiración, eso sirve bastante, sobre todo para tranquilizar y aquietar la mente, pues es lo que más ayuda en deportes como estos. También y, sobre todo, hay que tener una enorme capacidad de resiliencia y resistencia a los desafíos que te va poniendo este deporte. Por ejemplo, hace un mes me caí y quedé inconsciente. Desperté, tomé la moto y seguí corriendo, ese chip está en tu cabeza terminar, avanzar, llegar, meta, llegar a todo.

¿En la universidad también?

Por supuesto que sí, quiero sacar mi título de periodista y especializarme en documentales o cortos de cine que es lo que me gusta, además, siempre me ha gustado la narración y tengo habilidad para eso. Tengo que decir que hoy, estar en la UNAB me ayuda a seguir con mis competencias y con mi carrera de periodista sin tener que estar congelando o tener tantos topes, lo que es muy bueno para mí.

Volviendo a este deporte, como es de alto riesgo ¿le tienes miedo a la muerte?

No, respeto nada más. Solo respeto.

¿Cuántas lesiones tienes por practicar Motociclismo?

Honestamente no he contabilizado eso, pero puedo decir que he tenido lesiones principalmente en la espalda y en los brazos e incluso a veces hasta en los dedos. Hoy estoy recuperándome de una caída y aún estoy con tratamiento incluso dental, pero es algo que se sobrelleva bien.

¿Cuánto tiempo te toma volver a la moto después de una lesión?

Eso es muy variable. Depende del hueso o músculo. Normalmente si compromete a la espalda puede ser un mes, pero por una luxación o por una fractura incluso menos. Lo que pasa es que la gente normal le toma más tiempo recuperarse porque hacen las terapias de forma más amplia, dos veces por semana por ejemplo Yo las realizo de forma diaria y me aboco al 100% en ellas para recuperarme más rápido.

Un periodista innato

¿Cómo llegaste al periodismo?

De todo lo que me pueden preguntar, esto no me lo han preguntado nunca (ríe)… antes de ser deportista siempre se me daba muy bien el escribir, el narrar, la crónica, todo eso de ‘encontrarle la vuelta al punto’, lo que fue mi guía para estudiar hoy periodismo. Me decidí por periodismo, cuando llegué a trabajar como reportero al diario El Gráfico (Publimetro), cuando tenía 13 años (2013). Ahí, hacía notas y la escribía con ayuda de una editora que era amiga mía, que las corregía para publicarlas. En ese tiempo no sabía hacer titulares, tenía que pedir ayuda con eso a algunos amigos. Me preguntaba, ¿Cómo escribo ahora en forma de noticia?, porque lo mío siempre fue escribir historias.

¿Entrevistaste mucho?

Llegué a entrevistar a muchos personajes del mundo del Rally cuando era chico y por eso me invitaron a trabajar con El Gráfico Publimetro. De hecho, fui el único reportero en el Dakar de ese año. Y, ya a los 13 claramente tenía una vocación por comunicar. Me gustaba eso de andar reporteando entre los pilotos, conociéndolos, aprendiendo de ellos y de lo que hacían, además no eran todos chilenos, también extranjeros, lo que era mucho mejor. Siempre andaba con mi grabadora o el teléfono y honestamente lo que aprendí de esa experiencia fue invaluable, porque uno aprende los tiempos y cumplimiento de éstos. Por ejemplo, necesitaba enviar una nota antes de tal horario, porque el diario se imprimía a tal hora. Entonces, tenía que rebuscármelas y dar con un computador que tuviera internet en la mitad del desierto ¡Imagínate! Todo para despachar a Santiago de Chile.

¿Cómo es reportear un Dakar? No es lo mismo que otro deporte por el timing se entiende que son varios días de competencia.

Es toda una experiencia y requiere mucha paciencia. Por ejemplo, al piloto lo ves en la mañana, así que te levantas a las 04:00 a verlo, 03:30 AM al desayuno. Y a la hora de llegada, aquí llegamos a las 18:00 de la tarde. Todo lo que lees en internet es la mitad de lo que realmente pasa en cuanto al tiempo y organización de la carrera. Como hay drones y las motos tienen GPS, uno va observando el minuto dónde se encuentran los corredores. También está el helicóptero de la carrera que saca imágenes. Pero, todo este material o experiencia no es en vivo, porque en esa isla o lugar, es muy variable y no hay estaciones. A veces hay gráficos que de repente los pillan y claro, salen muy buenas fotos, pero otras no y se pierden muchas anécdotas o imágenes buenas.

¿Cuál es tu visión de los periodistas que cubren esta competencia?

Ya cuando toca el descanso del circuito, comprenderás que los pilotos vienen destruidos, muy cansados y que no quieren hablar con nadie y si lo hacen, siempre dicen algo parecido “estuvo bueno, muy duro, pero bien” y la foto. Ahora, los periodistas españoles sí son más ‘agujas’ y siempre están pendientes de todo. Acá en Chile es distinto, la percepción de este deporte es más exigente siempre quieren saber todo, les cuesta comprender un poco de qué se trata. En términos de reporteo, los europeos y latinos en general en este deporte, que es un deporte de motores, es mucho más de compañerismo que de competencia, acá no hay tanto golpe por exclusivas, no es como otra área donde hay rivalidades, aquí hay mucha buena onda.

¿Por qué te gusta el área de documentales?

Tengo que reconocer que tantos días de competencia arriba de la moto me dieron la oportunidad de observar muchos lugares y parajes y eso me motivó mucho. La paz la tranquilidad de ahí nació todo. Y bueno, a mi primo le gusta del área documentales, el área audiovisual y me apoya. Me pasa que cuando hago Rally y recorro los parajes, ‘onda’ National Geographic, veo que hay mucho que dar a conocer y eso me motivó. Ahora estoy terminando de grabar mi primer documental, de motociclismo tipo vivencial, que es lo que está pegando hoy en día.

También mencionaste el cine…

También me gusta el formato tipo corto de cine, porque en 15 minutos tú puedes capturar y mostrar mucho y eso lo puedo hacer aprovechando mi camino por el lado deportivo, que me da la oportunidad de recorrer mucho. También, en esta área seguir, la idea es ir ganando cosas, pero empezar principalmente comenzar a construir contenidos en el área comunicacional que es lo que hoy en día es necesario, crear posicionamiento del deporte que hago, porque hay tradición e historia en él.

Hoy eres un piloto destacado y reconocido a nivel nacional e internacional, y tu apellido tiene una gran connotación en el Rally, ¿Qué significa para ti esto?

Es un orgullo grande, acá en Chile el apellido De Gavardo es potente y es una responsabilidad y un gran orgullo llevarlo. Pero también siempre tengo que decir que: “Yo soy Tomás, hijo de Carlo de Gavardo, y en las carreras que corro aquí o afuera del país soy uno más al igual que todos los pilotos”. Si es cierto, hay algunos pilotos que me reconocen, pero la mayoría de las veces soy un corredor más. Sin embargo, aquí en Chile, siempre hay una doble lectura sobre lo que hago y a lo que me dedico, siempre está el comodín de mi padre para hablar sobre mí y a veces hay un “estigma” innecesario.

 

¿Cuánto marcó tu padre en seguir este deporte?

La tradición de seguir con este deporte que hizo tan conocido a mi padre y que hoy realiza mi hermano Matteo y yo, lo hacemos por elección y no porque nos tocó, amamos este deporte y amamos ser hijos de él, asumimos su apellido como una herencia importante al igual que este deporte, por eso lo realizamos con respeto y con orgullo. Nosotros estamos haciendo nuestra propia historia, historia que nuestro padre, Carlo de Gavardo, incentivó con el Motociclismo, que dejó una vara muy alta y un apellido de mucho peso en Chile frente a este deporte, pero en mi caso, también soy piloto profesional y tengo mis propias metas por lograr, siempre obviamente recordando con orgullo el legado de mi papá.